El festejo incluyó barrileteada, entretenimiento para toda la familia, juegos recreativos y chocolateada.

 

 

El domingo, con gran concurrencia de familias que se convocaron en el Aeroclub local, Lincoln celebró el Día del Niño con una jornada especial que convirtió en protagonistas a los más pequeños y brindó una variedad de propuestas para que el tradicional festejo transcurra de la mejor manera. 
La esperada celebración por el Día del Niño estuvo organizada por la Secretaría de Acción Social y se concretó en las instalaciones del aeródromo, sobre la prolongación de la Avenida Ayacucho donde el Municipio lleva adelante la construcción de la senda biosaludable que pronto unirá a ese sector de la ciudad con el mencionado espacio recreativo. 
Desde las 13.30 horas comenzaron a llegar grandes y chicos en los colectivos del transporte escolar que salieron de los distintos barrios de la ciudad; y también cientos de familias que lo hicieron por sus propios medios a pie, en bicicletas, motos y en vehículos para sumarse a la clásica barreteada que rápidamente se adueñó del cielo de la tarde linqueña. El intendente Salvador Serenal se hizo presente en el festejo y colaboró con el equipo de la Secretaría de Acción Social para que los más chicos puedan disfrutar al máximo de su día. 
Por su parte, la comisión de socios del Aeroclub ofreció una exposición con una docena de aviones que se alojan en el predio y que estuvieron al alcance de las familias y los chicos para sacarse fotos y recorrerlos por fuera. También fueron un gran atractivo los vuelos que de forma frecuente se fueron sucediendo y que permitieron a los más pequeños ver de cerca el despegue y aterrizaje de las aeronaves, lo que se transformó en un atractivo en sí mismo. 
Entre las actividades programadas hubo juegos inflables, postas con juegos recreativos a cargo de los profesores de Educación Física de la Dirección de Deportes; también estuvo la payasa “Aceituna” contagiando su simpatía y ocurrencias; la música animó la tarde; y el teatro y los títeres hicieron lo propio con las obras “El vendedor de globos” y “Mameluco”, respectivamente, ambas realizadas por el Equipo de Arte y Participación perteneciente a la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia (SeNAF) del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. 
A su vez, en el salón del aeroclub se montó una sala blanda con pelotero y otros juegos acordes para los más pequeños; y mesas para dibujar, pintar y colorear con lápices y plasticolas, espacio que fue coordinado por las maestras de los centros maternales y centros educativos complementarios municipales. 
No pudieron faltar los pochoclos, el chocolate caliente y tortas para grandes y chicos que fueron servidos por personal municipal y el cuerpo de Bomberos Voluntarios de Lincoln. También hubo globos y antifaces para los niños y niñas que pasaron por las mesas de dibujo. 


 

 

 

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