Una de las causas sería la gran cantidad de lluvia que se precipitó durante el fin de semana.

Con el correr de las horas del domingo, y donde la lluvia no daba tregua, las redes sociales eran caja de resonancia de los reclamos de los vecinos.

La mayoría se basaban en el impedimento físico de concurrir a las urnas, debido a las calles de la ciudad repletas de agua y barro. Otros, de los sectores rurales y de algunas localidades, también se expresaban en el mismo sentido. Campos inundados, caminos intransitables, agua por todos lados; era el factor común  de la queja ciudadana.

Quizás por ello, el porcentaje de votantes se vio disminuido respecto de elecciones anteriores.